martes, 22 de septiembre de 2009

Un traguito de radioactividad

PET es la abreviatura en ingles de positron emission tomography o tomografía por emisión de positrones, se trata de una técnica muy avanzada, muy útil aunque algo desconcertante, ahí les va por qué.

Te tienes que beber un traguito de un material radioactivo o te lo inyectas, generalmente va inyectado (por ejemplo el yodo radioactivo). Esos átomos de material radioactivo tarde o temprano revientan, cuando cierto tipo de átomos radioactivos explotan pueden llegar a producir un pedacito de antimatria.

Y aquí haré un pequeño paréntesis para explicar de forma muy breve, ¿Qué rayos es la antimateria? Resulta un tema muy extenso pero muy interesante: gracias al trabajo de un científico francés Paul Dirac (ganador del premio Nobel) quien desarrolló una fórmula matemática para tratar de explicar cómo funcionan los átomos desde el punto de vista de la teoría de la relatividad y llegó a la conclusión de que para cada pedacito de átomo que existe, debe existir una contraparte que se ve igual, del mismo tamaño, con la misma masa, con las mismas características pero con la carga eléctrica opuesta. Este material (antimateria) es tan simple y común como la materia, solo que cuando un pedacito de materia choca con uno de antimateria se aniquilan.

Para esto de la PET, te tomas un chorrito de material radioactivo y los átomos de esta sustancia van a reventar, de tal forma que va a salir “volando” un pedacito de antimateria que se llama positrón, este positrón es la antimateria del electrón y con un aparato especial el médico o el especialista detectan la presencia de esos positrones.

Como esta sustancia radioactiva llega a la sangre, empieza a circular por todo el cuerpo, si hay un tumor canceroso por ejemplo, ese tumor va a tener muchos vasos sanguíneos, y por la misma cantidad de sangre que haya (que es mucha e estos casos), va a haber también una alta cantidad de material radioactivo en ese punto y para eso es este tipo de tomografía.

Puede detectar tumores extremadamente pequeños, problemas físicos poco comunes etc. Aunque requiere de un aparato especial y lógicamente de personas que estén plenamente especializadas en la técnica.

Para este estudio se pueden utilizar distintos tipos de sustancias radioactivas, generalmente es yodo, fluor, o algún elemento químico de los que se clasifican como alógenos, como el cloro o el bromo; éstos son elementos que muy fácilmente se juntan con el hidrógeno y forman ácidos. Todos estos elementos en mínimas cantidades son indispensables para el cuerpo y hay algunas partes que se “nutren” con algunos de estos elementos. Si el médico sospecha que hay un problema en esas partes del cuerpo inyecta una sustancia que tiene fluor radioactivo y esa sustancia se va a concentrar en aquellos órganos que la buscan y entonces el médico va a poder ver la zona radioactiva que se forma alrededor de ese órgano y decidir si hay algo malo o no.

Se trata de un estudio un poco costoso pero que afortunadamente ya se practica en México con muy buenos resultados.

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